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| Salida de la Virgen / Jesús Pérez |
El encuentro de Chucena y su Alcadesa perpetua fue, como siempre, a las 9 de la tarde de tan glorioso día. Las campanas de la Iglesia avisaban de ese momento y el pueblo estalló de júbilo cuando la Señora cruzó el dintel de la puerta de la Iglesia, momento acompañado de la típica salva de cohetes y el sonido de la Marcha Real seguido de "La Estrella Sublime" por parte de la Banda del Rosario de Sanlúcar la Mayor. El angelito que porta el bastón de mando volvía a salir en el paso procesional después de 3 años sin hacerlo.
Momentos que suceden año tras año, pero que sin duda parecen ser distintos, como los encuentros con las Hermandades o la llegada a la Barriada del Pino, donde se rezó un Padrenuestro por los difuntos. También es destacable la llegada al Ayuntamiento o a la casa del Hermano Mayor, donde se le cantaron sevillanas, así como en otros puntos del recorrido.
Sin duda, es una noche que queda grabada en la retina de muchos, sobre todo de enfermos e impedidos, que han esperado un año para que vuelvan a recibir la visita de su Patrona, algo que siempre les reconforta. También fueron regalados muchos ramos de flores al paso de la Virgen por distintos hogares que se preparaban para la cita de esa madrugada de ensueño. La típica estampa de las mujeres que van de promesa es, sin duda, el reflejo de la mezcla entre tradición y actualidad.
En definitiva, noche de recuerdos, de emociones y sentimientos, de ilusiones y fervores bajo la mirada de la Virgen de la Estrella, la cual paseó majestuosa por su pueblo. A las siete y cinco minutos de la mañana se cerraron las puertas del Templo parroquial. Un año más se cumplió el milagro y el deseo de tener salud para volver a verla salir.
Fotos: Jesús Pérez y Adrián Pérez
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