La talla que realiza Martínez Cerrillo en 1960 luce pellica, manto celeste de brocado, cíngulo de flores dorado, mantilla, tiara de plata con pedrería y el aro de estrellas de plata. La Virgen se encuentra enjoyada con diversos broches y medallas, así como rosarios y pendientes de coral. El Divino Pastorcito lleva en esta ocasión cíngulo celeste y potencias doradas, así como varias joyas.
Mención especial en estas fechas merece el cuadro de la Inmaculada que preside el templo arriba del camarín de la Virgen ya que, a la sazón, fue titular de la iglesia, siendo una de las primeras en tener esa advocación por nombre.
El exorno floral lo componen las flores de pascua como símbolo de que la Navidad está a la vuelta de la esquina. Esta estampa pueden contemplarla cada domingo de cuatro a seis de la tarde.
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