La Fervorosa Hermandad de Nazarenos del Santísimo Cristo de Burgos, Nuestra Señora de los Dolores y Santa María Magdalena de nuestra localidad celebró la pasada semana el Quinario a su titular cristífero. Un año más, con la entrada de la Cuaresma se pudo contemplar la estampa de ver en el altar mayor de la Parroquia el altar efímero que realiza esta corporación.
El crucificado se presentaba sin potencias ni corona de espinas, la cual tenía la Virgen de los Dolores, vestida con manto y saya (esta cedida) negros con bordados en oro. En cuanto al tocado, el rostrillo le cae por el borde del manto hasta las mangas y el pecherín, también cedido, es bordado en oro, que termina en una cinturilla a juego con la saya. Completa el conjunto la corona y el puñal de plata. Santa María Magdalena llevaba saya morada con bordados en oro, mantolín negro también bordado y pecherín de encaje.
El altar estaba compuesto por velas de candelería, reliquia de Santa Ángela de la Cruz, libro de reglas, respiraderos del palio y el exorno floral.
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